CAMPILLO C.F: 0 - C.D. CASTILLEJOS: 2 CAMPILLO, C. F.: Manuel David, Jorge, Pinilla II, Ale, Fernando, Samuel, Jairo (67’. Gordillo), Raúl, José Miguel, (69΄ Jero), Emilio (62’ Dani Rachón)), Javier C. D. CASTILLEJOS.: Pérez, Cabra, Ginés, Nimi, Marcos (90’ Juan), David (60’ Pepe), Boba (86’ Joselito), Gόisque, Ale, Uva (81’ Esteban), Jhonny ARBITRO: Quesada Bodion, auxiliado en las bandas por Marín Gómez y N’sue Moto, demasiado permisivo con las pérdidas de tiempo del equipo visitante y señaló un penalti inexistente que significó el segundo tanto foráneo. Vieron la admonitoria amarilla los locales Ale (71’) y Fernando (61’), mientras que por el bando castillejero la vieron Ginés (57’), Marcos (82’), Ale (78’) y Pepe (77’) GOLES:0 - 1. 25’. Marcos de cabeza. 0 – 2. 71’. Ginés de penalti. Incidencias: cuarto partido en el destierro zalameño de la escuadra campillera. Floja entrada, unos 50 espectadores, en una tarde soleada.

En la tarde de ayer daba comienzo la segunda vuelta de este Grupo de la primera provincial, visitaba el zalameño Perea Anta el cuadro representativo de Villanueva de los Castillejos, equipo que en el encuentro que abría liga, allá por el mes de Octubre, se vio sorprendido en su feudo por los pupilos de Arsenio Piñero y cedieron los tres puntos.

La escuadra andevaleña presentó en sus filas un poderío físico que asustaba a todos los presentes por tratarse de jugadores fornidos y altos en casi su totalidad, pero no por esto se intimidaron los jugadores campilleros y fueron los que de principio intentaron dominar el encuentro, sobre todo por medio de un activo Javier que en los primeros minutos merodeo e incordió tanto a la defensa visitante como a su guardameta. Después de este comienzo dinámico de los locales, el partido pasó a entrar en una fase de tanteo en la medular donde los visitantes hacían valer su altura y poder físico para dominar los ímpetus campilleros, sin por esto pasar por apuros ninguna de las dos metas, ya que obviando las tempranas acciones de Javier el bagaje ofensivo de uno y otro equipo era totalmente negativo.

Pasado el ecuador de la primera mitad, concretamente a los 25’, se produce una falta sin aparente peligro a la altura de la línea central del conjunto visitante, el esférico lo pone en juego Ginés lanzando un balón en profundidad sobre el área penal defendido por los locales, el guardameta Manuel David hace una defectuosa salida y Marcos muy atento cabeceó llevando el balón a las redes y poniendo por delante en el marcador a su equipo.

Esta ventaja se antojaba como demasiado premio por los visto hasta el momento, pero el gol sumió a los de Piñero en una depresión que aprovecharon los castillejeros para desplegar un fútbol aunque no vistoso, si práctico que le hizo dueños y señores del encuentro, convirtiéndose esta tónica en el referente hasta el inicio del camino de vestuarios, exceptuando una buena colada del campillero Javier que tras ejecutar un perfecto pase de la muerte la bola se paseó por delante del portal de Pérez sin encontrar rematador, cuando corría el 37’.

La segunda mitad poco nos deparó, a pesar de que el míster local intentó enderezar el rumbo con cambios ofensivos para dinamitar el partido, pero los visitantes con mucho oficio supieron dormir el mismo a base, sobre todo, de continuas pérdidas de tiempo que traían el desespero a las gradas, ya que podríamos decir que de esta segunda mitad no se llegó a disputar ni tan siquiera 20’ de juego real. Realmente lo que aderezó esta aburrida fase fue el injusto penalti señalado por el trencilla onubense, muy protestado tanto por el graderío como por los jugadores, que supuso el a la postre resultado definitivo cuando las manecillas del crono marcaban el 71’. Esta jugada sacó del encuentro a los locales cosa que aprovecharon los visitantes para adormecer el encuentro y llevarlo a su término, consiguiendo una victoria que merma la moral del cuadro campillero.